El sistema se basa en la estandarización del sistema constructivo que aprovechaba ramas y barro fundamentalmente, para crear un entramado que funcionase como cerramiento vertical fundamentalmente.
El sistema tendrá sentido ecológico donde sea fácil la accesibilidad a estos dos materiales. El paso a la estandarización se basa en la facilidad de montaje, transporte y la adecuación a las nuevas herramientas, intentando aumentar el rendimiento del material.
El sistema tradicional se asocia a Sudamérica fundamentalmente por su nombre, pero el método constructivo ha sido reproducido simultáneamente en África, por ejemplo, utilizando excreciones animales como material que da la consistencia final.
Ventajas
Por su constitución estructural flexible, se dice que funciona bien ante sismo, lo cual se asocia también a la zona activa sísmicamente en la que se le da origen, pero que en construcciones de una o dos alturas, no es significativo.
Dependiendo del tipo de recubrimiento puede ser más o menos vulnerable. Esta aclaración se debe fundamentalmente a que este tipo de construcciones se realizan en condiciones donde las exigencias habitacionales son mínimas (protección personal y no confort personal)
Referencias