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El diario de obra: trabajos en altura y líneas de vida

Si estás en España es probable que tengas a menos de 10 km edificios construidos en los años 70 y 80, esto es, próximos a los 50 años. Si pensamos en la cantidad de construcciones de este tipo que hay en nuestras ciudades, podemos imaginarnos como están sus fachadas. Lo más habitual es que haya muchas de estas fachadas que tengan falta de mantenimiento y que sean lienzo en blanco para infinidad de patologías. ¿Cómo se reparan y qué tiene que ver esto con las líneas de vida? Ahora lo vemos.

Fíjate en la siguiente imagen. Se trata de una fachada de finales de los años 60, muy expuesta al ambiente marino, con un revestimiento de árido. Este tipo de revestimiento es poroso y con el paso del tiempo ha perdido su adherencia, formando ampollas con riesgo de desprendimiento. Se puede ver a un operario trabajando en la fachada, descolgado desde la cubierta con una línea de vida.

Puesto que cada vez es más frecuente encontrarse trabajos verticales en las fachadas, también vemos la necesidad de contar con buenos sistemas de fijación para dichos trabajos, las líneas de vida. Debido al mantenimiento al que deberíamos de estar obligados a realizar en nuestras fachadas, debemos de llegar a cualquier punto de la fachada para realizar labores de mantenimiento, como pueden ser este tipo de reparaciones (ampollas, fisuras, grietas…) , sellados de carpinterías, fijación de instalaciones desprendidas…

Por otra parte, no debemos de olvidar las cubiertas. Son el punto principal de posibles entradas de agua y el elemento de protección frente a la intemperie. Su correcto mantenimiento es crucial a la hora de mantener un buen ambiente interior, libre de humedades, filtraciones, condensaciones… y las líneas de vida son el obligado compañero que nos tiende la mano de la seguridad en el punto más alto del edificio.

Las línea de vida LUX-top® Sistemas Anticaídas garantizan la máxima seguridad al trabajar en zonas con riesgo de caída y permite obtener una libertad de movimiento óptima con una función de retención permanente. Las líneas de vida se pueden adaptar a las diferentes estructuras de cubierta y de fachada. Unos elementos de pretensión y amortiguación especialmente desarrollados garantizan una reducida carga en la caída. LUX-top® FSE 2003 es un dispositivo de anclaje con guía horizontal según la EN 795, tipo C. El sistema está aprobado para la construcción y para ser utilizado por un máximo de 6 personas. Los conectores, tales como mosquetones, ganchos y argollas, tienen que ser capaces de soportar un peso mínimo de 2270 kg (o lo que es lo mismo 22.2 kN).

LUX-top® FSA 2010 es un sistema de riel afiligranado de aluminio con guía fija para que la utilicen hasta 4 personas al mismo tiempo y sirve para anclar el equipo de protección individual contra caídas (EPI contra caídas) al trabajar en zonas con riesgo de caída. El sistema de riel LUX-top® se puede utilizar con un dispositivo anticaída retráctil y también es adecuado para las técnicas de acceso y posicionamiento mediante cuerdas (SZP). Con conectores de recta, soportes en diferentes ángulos y elementos en curva y arcos, el sistema se puede adaptar a cualquier característica de la construcción.

Las líneas de vida exigidas por la normativa

El Real Decreto 2177/2004 de 12 de noviembre establece las disposiciones mínimas de seguridad y salud para los trabajos temporales en altura. En cuanto a las líneas de vida, que son sistemas anticaídas diseñados para proteger a los trabajadores, el RD 2177/2004 las menciona dentro del marco de los dispositivos de protección colectiva o individual para evitar caídas desde altura.

Según el RD 2177/2004, el uso de líneas de vida es necesario cuando se realicen trabajos en altura, y no sea posible garantizar la seguridad a través de medios colectivos como barandillas, redes, o plataformas. En este caso, deben implementarse equipos de protección individual (EPI) contra caídas, dentro de los cuales las líneas de vida son fundamentales.

Líneas de vida son necesarias en las siguientes situaciones:

  • Trabajos en altura sin protección colectiva suficiente: Si no existen medidas colectivas como barandillas, deben usarse líneas de vida u otros sistemas de retención o anticaída.
  • Acceso a zonas elevadas: Cuando los trabajadores deben moverse o trabajar en lugares donde hay riesgo de caída (por ejemplo, techos, estructuras, o plataformas sin protección perimetral).
  • Trabajos temporales en cubiertas o tejados: Las líneas de vida suelen ser requeridas en tareas de mantenimiento o reparación de techos.

El RD también establece que todo equipo de protección personal contra caídas, incluyendo las líneas de vida, debe estar adecuadamente revisado, mantenido y utilizado correctamente por los trabajadores.

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