Una cimentación es directa cuando se reparten las cargas de la estructura en un plano de apoyo
horizontal. Cuando las condiciones lo permitan, las cimentaciones directas se construyen a poca
profundidad bajo la superficie (3-4m) por lo que también son llamadas superficiales. Se clasifican en:
– Zapatas aisladas
– Zapatas corridas
– Zapatas corridas para pilares
– Emparrillado de zapatas corridas
– Losa corrida de cimentación
Todas las cimentaciones superficiales corren el riesgo de heladicidad, por lo que deben enterrarse
por lo menos de 80 a 130cm por debajo del nivel del terreno. En el caso de excavaciones para zapatas de
distinto nivel, se realizarán de forma que no se produzcan desplazamientos de las tierras entre los dos
niveles.