La mayoría de las puertas se fabrican a medida. Son un elemento simbólico, a la vez que personal, uno de los puntos débiles del cerramiento que debemos de cuidar, de manera que pueda tener las cualidades del muro en cuanto a estanqueidad, defensa contra impactos, resistencia al viento, y por otra parte que sea ese punto donde el muro se franquea de manera segura.
Cuando la puerta empieza a fallar, toda la seguridad cae por su propio peso, evidenciando un problema en la envolvente de nuestro edificio. Es por eso que es una obra necesaria, siempre que no haya sido bien cuidada o mantenida, que podría haber durado mucho más. A la hora de elegir un material para la puerta elegiría el acero inoxidable, y ahora explico porqué, antes dejo la web de https://portalinox.es como referencia.
El acero inoxidable tiene de manera natural un brillo característico, que es aportado gracias a su contenido en cromo en su masa, en torno a un 11 %. El cromo y otros metales aleantes (niquel, wolframio, molibdeno…) tienen afinidad por el oxígeno, lo que protege el hierro de la corrosión. Si nos detenemos a ver perfiles de acero inoxidable nos damos cuenta de que no se trata solamente de una capa de acabado, sino que es el material en masa.
Su nombre nos lleva a confusión, no es que sea inoxidable, sino que tiene mucha más resistencia a la oxidación. Algunos habréis visto que ocasionalmente tienen manchas en forma de puntos, o picaduras generalizadas, esto se debe a la presencia de algunos ácidos, y eso hay que tenerlo en cuenta a la hora de elegirlo. Veamos cuales son los tipos de aleaciones más utilizadas:
Serie 400 – Aceros inoxidables martensíticos y ferríticos. Los martensíticos son aquellos que solamente tienen cromo, presentan una resistencia moderada a la corrosión, frente a los ferríticos, que tienen un mejor comportamiento gracias a la aleación con molibdeno, sicilio, aluminio. Ambos son magnéticos y son pobres frente a la soldadura, se limita su uso sobre todo al conformado en frío.
Serie 300 – Aceros inoxidables austeniticos, aleaciones con cromo y níquel. Es la serie más extensa.
Serie 200 – Aceros inoxidables austeníticos, aleaciones con cromo manganeso y nitrógeno. La adición del nitrógeno se debe a que se incrementa la resistencia mecánica. Los aceros austeníticos (de la serie 200 y 300 se pueden soldar, tienen un alto nivel de limpieza y por tanto de higiene en su acabado y no son magnéticos. No tienen tratamiento térmico para endurecerse.
Otras familias menos utilizadas son los aceros inoxidables llamados dúplex y los endurecibles por precipitación.
A continuación paso a copiar de la guía de clasificación de acero inox las características y aplicaciones de los tipos de aceros inoxidables más comunes de estas series que acabo de enunciar, que tienen aplicación en la arquitectura:
301.- Menor resistencia a la corrosión que otros aceros de la serie 300. Puede ser fácilmente formado y ofrece buenas propiedades de soldabilidad. Utilizado en partes de aviones, adornos arquitectónicos, cajas de ferrocarril y de trailer, cubiertas de rines, equipos para procesamiento de alimentos.
303.- Especial para propósitos de maquinado, buena resistencia a la oxidación en – ambientes de hasta 900º C. Se emplea para cortes pesados. Se usa para la fabricación de partes para bombas, bushings, partes maquinadas y flechas.
304.- Todo propósito, tiene propiedades adecuadas para gran cantidad de aplicaciones. Se recomienda para construcciones ligeras soldadas que requieran buena resistencia a la corrosión. Tiene buen desempeño en temperaturas elevadas (800 a 900º C) y buenas propiedades mecánicas. Es recomendable cuando se requiera soldar altos espesores de material. Algunas aplicaciones son equipo químico de proceso, accesorios para aviones, remaches, equipo para hospitales, etc.
309.- Poseen alta resistencia mecánica, tenacidad y excelente resistencia a la oxidación en temperaturas de hasta 1000º C. Calentadores de aire, equipo químico de proceso, partes de quemadores de turbinas de gas e intercambiadores de calor son algunas de las aplicaciones más comunes fabricadas con este tipo de acero.
310.- Es frecuentemente usado en servicios de alta temperatura. Se utiliza para – fabricar calentadores de aire, equipo para tratamiento térmico de aceros, equipo químico de procesos, etc.
316.- Resistente a la corrosión frente a diversos químicos agresivos, ácidos y atmósfera salina. Se utiliza para adornos arquitectónicos, equipo para el procesamiento de alimentos, farmacéutico, fotográfico, textil, etc.
321.- Es similar al 304, pero contiene una adición de titanio equivalente a cinco veces el contenido de carbono. Las principales aplicaciones de este acero son recipientes a presión y almacenamiento, partes de motores de jet, equipo químico de proceso, etc.